Curador
Créditos
DETALLES DEL PROYECTO
En Los ojos bajo la sombra, parte de la producción de la grana cochinilla y su relación histórica con Canarias. El título proviene de un texto de principios del siglo XX que narra la labor de las trabajadoras canarias en los campos y el valor de esta materia prima en la época. La grana cochinilla es un insecto domesticado en México y otros lugares de América que parasita en los nopales. Las hembras adultas se reproducen en las pencas del nopal, se extraen posteriormente, se secan y trituran para obtener el pigmento rojo. Llamado en lengua náhuatl nocheztli (sangre de tunas), el colorante se emplea para la tinción de distintos materiales como cerámica, y especialmente en textiles y pinturas.
La obtención de la grana cochinilla la realizan mayoritariamente las mujeres, que construyen una relación de cuidado y protección con el parásito. Hembras insectos cuidadas por hembras personas y cultivadas en un ciclo de producción y reproducción. Así, el pigmento proviene de lo vivo, de su relación con otras especies y con la violencia de su molienda. Como en otras piezas como Camuflaje o Molienda, Candiani aborda la noción del trabajo colectivo de las mujeres y las condiciones laborales que establecen en lo que denomina las “coreografías de la labor”. La presencia femenina y su fuerza de trabajo como herramienta productiva resultan imprescindibles para entender la manufactura y confección del pigmento.
La grana cochinilla se importó desde América ya en el S.XV y supuso una importante fuente de ingresos para la corona española, junto con la plata y el oro, lo que le valió el apodo de “oro rojo”. Las rutas de explotación de la colonia se intensificaron en los siglos siguientes, propiciando rutas comerciales de importación a Europa y abundantes flujos de migración. En el S. XIX, la grana se introdujo ampliamente en Canarias, pues el clima de la isla favorecía la siembra de los nopales. Ante la crisis de los cultivos del azúcar y vid en las islas, la producción de la grana representó una oportunidad para el auge de la industria textil en Europa y la fascinación subsiguiente por el colorante.
La presencia literal del pigmento en esta pieza evoca el intercambio comercial desde la época colonial y el despojo del territorio. Los mapas abstractos teñidos de rojo señalan la violencia de esas fronteras coloniales y la fuerza política que representa el rescate de esta materia prima. Como una nueva manera de habitar la cartografía y la historia, los tejidos devienen cicatrices de un relato camuflado que emerge proponiendo nuevas texturas y lecturas del lugar.
Ficha técnica
Tejedoras
DETALLES DEL PROYECTO
Pusiéronse de nuevo a la faena. Las seis mujeronas, dos viejas y las otras cuatro jóvenes, la mano bien forrada en trapajos, que simulaban guantes, la cara cubierta a estilo moruno, sin dejar ver más que los ojos bajo la sombra de la enorme sombrera de palma, cogieron la cuchara, especie de apagaluces, y comenzaron, enzarzadas entre los nopales de recio tronco y resistentes pencas, altos y compactos, a recoger la cochinilla.
Ángel Guerra. A merced del viento (1912).
En esta pieza se aborda la noción del trabajo colectivo de las mujeres con una mención histórica al uso de mano de obra forzada en los sistemas de encomienda y repartimiento para la cría de la grana cochinilla, así como para la fabricación de tintes. La presencia femenina y su fuerza de trabajo como herramienta productiva, muchas veces bajo la sombra, resultan imprescindibles para entender la manufactura y confección del preciado pigmento.
La pieza también implica en sí misma una migración de saberes y de materiales. Las lanas teñidas en México hacen el mismo viaje de siglos atrás. La acción en sitio que sucede en esta pieza es el acto de entretejer: entretejer culturas, saberes, geografías en un territorio que el espectador transita. La presencia literal del pigmento en esta pieza evoca el intercambio comercial desde la época colonial y el despojo del territorio. La trama abstracta teñida de rojo señala la violencia de las fronteras y el acto político que representa el rescate de esta materia prima. Como una nueva manera de habitar la cartografía y la historia, los tejidos devienen cicatrices de un relato camuflado que emerge proponiendo nuevas texturas y lecturas del lugar.
Ficha técnica
Créditos
DETALLES DEL PROYECTO
La pieza es un viaje a través del proceso de domesticación de la grana cochinilla. Comienza en el mar verde del valle de Nopaltepec, en el estado de México, viaja a los invernaderos de Tlaxcala, donde es cuidada por manos con conocimiento antiguo, y termina en el vientre mismo del insecto y en sus múltiples alumbramientos. Es un viaje al nacimiento del color.
La infesta y cosecha de la grana es una actividad primordialmente de mujeres, que involucra saberes, cariño y paciencia. Esta pieza es un homenaje a esas manos que la crían, cuidan y recolectan, y también a esa hembra de distinta especie, la grana, que pare y expulsa a sus crías abrazada a las pencas de las que se alimenta.
Ficha técnica
DETALLES DEL PROYECTO
Las flotas españolas transportaban productos agrarios y manufacturados europeos a Nueva España, y traían de vuelta plata y otros productos coloniales como la grana cochinilla. El cultivo de la grana cochinilla fue impulsado por los españoles en el siglo XV y se extendió hasta Guatemala. El pigmento revolucionó las industrias de colorantes y fue uno de los ramos más lucrativos de la economía iberoamericana.
Este mapa cosido reproduce la ruta de ese comercio del siglo XVI al siglo XIX y permite a la grana habitar de nuevo el tránsito de la explotación histórica derivada de la conquista. Como una huella, el rojo se inserta y ocupa esa herida cartográfica que significaba la colonia.
Ficha Técnica
DETALLES DEL PROYECTO
La grana cochinilla se utilizaba en la pintura mural, la decoración de jícaras, teñido de textiles, pintura de códices o como cosmético. También fue objeto del tributo que exigían los aztecas en sus territorios.
La Matrícula de los Tributos es uno de los llamados códices mexicas, realizado entre 1520 y 1530 probablemente copiado de un original mexica años después de la conquista. Inspirado en códices originales copiados por los tlacuilos (pintores de códices), fue pintado por escribas mexicas, que usaron el formato pictórico antiguo y añadieron posteriormente las descripciones en español. Este códice, anexado posteriormente al códice Mendocino, registra las tributaciones hechas al Estado Mexica y presenta información sobre el territorio y la estructura socioeconómica de la sociedad. Sus hojas en papel amate muestran los altépetl (entidades políticas) tributarios sometidos a los mexicas, así como los productos y las cantidades que tributaban.
Siguiendo la secuencia inherente de reproducción y transmisión de los códices, los bordados de la pieza transcriben y traducen esas tablas de tributos a otra materialidad. La costura en grana permite al pigmento hablar como materia y textura e incidir en su propia historia de explotación y valoración como elemento de lucro y beneficio.
DETALLES DEL PROYECTO
Ficha técnica
Agradecimiento
DETALLES DEL PROYECTO
La investigación de Tania Candiani se tiñó de rojo al indagar sobre las relaciones migratorias de África con Canarias a través de la llamada ruta Atlántica, una de las más peligrosas del Mundo. En sus búsquedas aparecían de manera insistente las típicas fotografías de los migrantes que han llegado a tierra cubiertos con mantas rojas. Esta imagen icónica reproducida hasta la saciedad por los medios de comunicación ha provocado cierta insensibilidad en el público y una normalización de esta situación de emergencia.
Tania Candiani recupera un elemento fácilmente reconocible para poner sobre la mesa cuestiones vinculadas a las violencias, a los desplazamientos y a las fronteras y, de esta forma, escrutar sobre los conceptos de explotación, herida o camuflaje.